SEA UN MISIONARIO EN LA ORACIÓN...
Si admitimos, entre otras cosas, que el dinero es necesario para ir a delante, también creemos que sin oraciones todo el dinero del mundo no será suficiente para sostener una obra espiritual. La oración mueve la mano de Dios. Y la bendición viene de Dios.
Con tal razón, le invitamos a ser un misionero en oración. Ud. puede viajar a Suiza, a Italia, a India, a Rusia, a la República Democrática del Congo, A la República del Congo en sus rodillas y cada vez que lo desea. Pedirá a Dios de cumplir grandes operaciones en esas naciones, en donde nuestros misionarios se aplican en el terreno con grandes sacrificios.
Por eso, entretenemos una relación estrecha con los que han declarado querer orar por nuestra obra. Les enviamos una carta con la presentación de todas las necesidades. De esa manera una cadena de oraciones se organiza a la distancia y cada uno, cada una puede orar para estos asuntos precisos.
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Si tiene en el corazón de ser parte de esta cadena que mueve montañas, entonces ¡contáctese pronto con nosotros!